para moverse aquí hay que olvidar
lo que se ve
un pie delante del otro nada más rondando
lo que se siente
olvidarse de lo que nos espera ojalá que sea tarde
para seguir aquí hay que pensar
lo que se debe
hacer que valga la pena para siempre
lo que se amó
recordar cada momento para una redención posible
o, al contrario
desesperar de cualquier paz
aún la conquistada en una breve charla en la mañana
en la risa de aquellos que alguna vez amamos
pretender que ya hemos pasado si se ha rendido el alma
y no nos queda más
elegir es un lujo del pensamiento
a veces ni siquiera se puede elegir
La tumba profanada
Hace 2 días
2 comentarios:
Una manera de sincerarse con el cotididiano devenir de la vida.
Muy bueno,cariñitos
Muchas gracias, Yonky.
Abrazos
Publicar un comentario